Es el primer libro que leo de Higgins, a pesar de que su nombre me era conocido y que la relacionaba con novelas de misterio, nunca había caído en mis manos nada de ella y decir que este me costó empezarlo porque el título no me resulta muy sugerente, más bien parece una novela romántica previsible, pero nada de eso, la anciana señora Mary, sabe muy bien lo que hace al escribir novelas de este género, de hecho lleva hacíéndolo bastantes años, cosa que empezó a hacer de forma profesional al fallecer su marido y necesitar ingresos, antes se ganó la vida como azafata y editora.
La novela tiene personajes muy bien descritos, la trama es interesante y lo va resolviendo poco a poco dejando el misterio hasta el final, hecho de menos algún diálogo ácido, pero en general me ha gustado.
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